Índice de El expreso. Un intento de acercamiento a la Federación Anarquista del Centro de la República Mexicana (1936-1944) de Chantal López y Omar CortésDocumento anteriorDocumento siguienteBiblioteca Virtual Antorcha

Documento 28.

Sugerencias a la F. A. C.

Estimados compañeros:

El hecho que determina os haga unas sugerencias, se asienta en el amor a las ideas, y es que, salvando diferencias y lagunas que puedan existir en vuestra organización, tengo en estima, por considerar que ocupa el primer lugar dentro del movimiento, por su actuación y eficiencia en la propaganda de nuestros ideales.

Hecha la aclaración correspondiente, y sobreentendiéndose que son sólo sugerencias las que haga, voy al asunto.

Se ha probado hasta la saciedad, que el contenido humano de nuestras ideas, no es una ilusión o quimera propia de quijotes, que es igual a locos. Ciertamente se han alimentado y afianzado. Pero, como dice el addagio: No basta tener razón, es necesario tener la fuerza. Y, esa se consigue con una actuación intensa, firme, coherente y positiva, cosa que hasta aquí, hemos de confesar, que en la mayoría de los países no hemos tenido.

La falta de coherencia de los compañeros ha determinado una mínima organización que se ha traducido en un esqueleto que deambula, en lugar de un cuerpo sano, pletórico de sabia que expanda vida por doquier.

El individualismo de Nietzche, ha sido el refugio de la inmensa mayoría de los compañeros, y otros han vegetado sin pena ni gloria, es decir, que han desaparecido sin ser útiles, para nada, a las ideas.La asociación es necesaria, precisa e imprescindible al individuo, puesto que ella es el incentivo moral que compromete al hombre a cumplir con el deber que nos trazamos para la consecución de un mundo sin amos y sin esclavos. Ella, la asociación, es la función que hace al órgano, que aplicado al hombre, significa que la acción cotidiana impide su anquilosis moral, y en su lugar, lo eleva a la categoría de ser útil para las ideas y la humanidad.

La organización específica, con ser imprescindible, no tiene el suficiente campo de acción para sus componentes, y es por ello, que constatamos cómo nuestra influencia es casi nula.

Hemos de percatarnos que el anarquismo es un ideal que pertenece a la humanidad, pero, es evidente también, que todos los privilegiados no tienen aliciente por él, y, por ende, es obligado realizar el proselitismo entre los que tienen hambre de pan y sed de justicia.

Los lugares más apropiados, son las organizaciones de los trabajadores.

La penetración en esos lugares, debe ser sugerida, orientada y controlada por la organización específica.

En este país, dado lo poco que representamos en estos momentos, creemos que debe organizarse el siguiente plan de trabajo:

Hablo para la F. A. C., pues cuando lo pueda, lo haré en la F. A. M.

Primero.

A) El Secretariado de la F.A.C. será ampliado con los miembros que sean precisos, con delegados de los grupos de la localidad donde resida el Comité, que serán vocales del mismo.

B) El Comité de la F.A.C., mandará una circular a todos los grupos e individualidades pertenecientes a la misma, con el siguiente cuestionario:

a) ¿Cuántos compañeros pertenecen a la organización obrera?

b) ¿A qué sindicato pertenecen?

c) ¿A qué central sindical pertenece el sindicato?

d) ¿Cuántos compañeros ejercen cargos de delegados en la fábrica, taller, ejido o comunidad agraria?

e) ¿Cuántos son los que forman parte de los Comités de los sindicatos, u otros organismos sindicales, Federaciones Nacionales de Industria, locales o estatales?

f) ¿Cuántos sindicatos son orientados por nuestros compañeros?

g) Sugerencias que consideren los compañeros más eficientes, para que nuestra influencia se deje sentir en el seno de los sindicatos.

Una vez los datos en poder del Comité de la F.A.C., éste deberá nombrar de su seno un Secretariado, que trabajando de acuerdo y controlado por el Secretariado de la F.A.C., realice la siguiente labor:

Segundo.

a) Hará sugerencias a los Comités de sindicatos que sean integrados por compañeros nuestros, en el sentido de que se propaguen las ideas con la máxima intensidad, sea divulgando nuestra prensa, ayudándola económicamente u organizando ciclos de conferencias;

b) En todos los sindicatos se deben constituir grupos denominados sindicales, integrados por nuestros compañeros y simpatizantes, que tendrán la siguiente misión: distribuir nuestra prensa y demás literatura; publicar en nuestros periódicos las injusticias y canalladas que cometen los jefes de taller o los patrones, fustigar y descubrir las traiciones que realicen los líderes de su sindicato o de la central obrera a que estén afiliados. Reunirse antes de toda Asamblea General del sindicato, para discutir el Orden del Día de la misma, y llevar a ella un criterio unificado, que nos dé posibilidades de triunfar en nuestras apreciaciones;

c) De todos los trabajos que realicen los comités de sindicatos, delegados y grupos sindicales, informarán al Secretariado Sindical de la F.A.C., para que éste esté enterado de todos los asuntos y pueda informar, sugerir y determinar la orientación a seguir por sus componentes.

Las cuestiones de detalle, será la práctica que las determinará. A mi entender el periódico es necesario que salga. Insisto en que debe venderse y no repartirse gratis.

Los compañeros deben procurar ser lo más activos y morales que se pueda. Hay que forjar la conciencia entre los trabajadores; que donde haya un anarquista no quede sin respuesta una injusticia, la cometa quien quiera que sea. Vuestra acción, podéis extenderla hasta los Estados en donde no exista Federación constituida. A vosotros os toca decidir si esas, mis sugerencias, son justas o plausibles.

Vuestro y del anarquismo.

M. Alcón

(De Libertad. Publicación mensual, San Luis Potosí, S.L.P., Época III, Nº 1, de agosto de 1943).


Índice de El expreso. Un intento de acercamiento a la Federación Anarquista del Centro de la República Mexicana (1936-1944) de Chantal López y Omar CortésDocumento anteriorDocumento siguienteBiblioteca Virtual Antorcha