Índice de Crónicas y debates de la Soberana Convención Revolucionaria Recopilación de Florencio Barrera FuentesSesión celebrada el día 21 de octubre de 1914 en la ciudad de Aguascalientes Primera parte de la Sesión celebrada el día 23 de octubre de 1914 en la ciudad de AguascalientesBiblioteca Virtual Antorcha

CRÓNICAS Y DEBATES
DE LAS SESIONES DE LA
SOBERANA CONVENCIÓN REVOLUCIONARIA

Compilador: Florencio Barrera Fuentes

SESIÓN CELEBRADA EL DÍA 22 DE OCTUBRE DE 1914 EN LA CIUDAD DE AGUASCALIENTES

SUMARIO

Se aprueba el envío de una excitativa a los generales que tengan mando de fuerzas para que concurran personalmente a la Convención.- Son discutidas varias credenciales y se rechaza la expedida por el general García.- Se aprueba la moción presentada para que se retire la censura al telégrafo.- Lectura de importantes telegramas que, sobre asuntos diversos, dirigieron a la Convención los generales Felipe Angeles, José María Maytorena y Cándido Aguilar.

PRESIDENCIA DEL C. GENERAL ANTONIO I. VILLARREAL


A las 3.40 .p.m., con el número competente de ciudadanos delegados, según consta en la lista que previamente pasó la Secretaría, se abrió la sesión.

El C. secretario Santos dio cuenta con el acta de la sesión anterior, y la puso a discusión.

El C. Hernández y García:

Tenga usted la bondad de hacer una rectificación en el apellido.

El C. secretario:

¿Cuál Hernández?

El C. Hernández y García:

Hernández y García, respecto de la proposición que hacía yo ayer.

El C. De la Barrera:

No consta en el acta una proposición que hice para que esta Asamblea, por conducto de los gobernadores y jefes políticos, haga saber al pueblo la erección de esta Convención.

El C. secretario:

Sigue a discusión el acta. ¿No hay quién haga uso de la palabra? Con las modificaciones propuestas, se pregunta si se aprueba. Los ciudadanos que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse en pie. Aprobada.

En seguida el ciudadano secretario Almanza dio lectura al dictamen de la comisión de Poderes que consulta: Se aprueben las credenciales expedidas por los ciudadanos Francisco Urbalejo y Víctor Montes en favor de los ciudadanos José H. Osterman y Elfego Chargoy, respectivamente. Que se pregunte a la Secretaría de Guerra si el general Ramón Frausto es efectivo o asimilado.

Igualmente, que se pregunte a esta Asamblea si conoce al ciudadano ingeniero J. María García, para que la comisión pueda dictaminar.

Que se acepte la moción presentada por el general J. J. Cervantes para que se haga una excitativa a todos los generales, a fin de que concurran personalmente a esta Asamblea.

Que debe pasar a la comisión de Justicia la acusación presentada en contra del delegado Piña; pidiendo a esta Asamblea informes referentes al señor Pedro Guzmán, por no conocerlo y para poder dictaminar; y, finalmente, que se acepte la credencial expedida por el ciudadano general José María Cabanillas en favor del ciudadano Manuel Ortega.

El C. secretario:

Está a discusión en lo general. ¿No hay quién tome la palabra? Los que estén por la afirmativa, sirvanse ponerse en pie. Aprobado.

Está a discusión en lo particular lo relativo a la credencial del general Urbalejo a favor del capitán primero José H. Osterman.

Está a discusión. En votación económica se pregunta si se aprueba. Los ciudadanos que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse en pie. Aprobada.

Está a discusión la credencial expedida por el general Víctor Montes, en favor del capitán Chargoy.

El C. Leopoldo Ruiz:

Que se corrija el nombre: No es Montes, sino Monter.

El C. secretario:

Con la modificación pedida por el ciudadano preopinante, en votación económica, ¿se aprueba? (Una voz: ¡No se oyó la modificación!)

El C. De la Barrera:

Suplico a los señores delegados que no hablen para sí, sino para todos.

El C. Secretario:

Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse en pie.

El C. Berlanga:

No se sabe cuál fue la modificación.

El C. secretario:

Aprobado. (Voces: ¡No, no; hay duda!)

El C. Berlanga:

Pido la palabra para una aclaración.

El C. Paníagua:

Monter.

El C. Berlanga:

No supimos por acá lo que había objetado el señor delegado; por eso no podemos aprobar ni desaprobar nada. Suplico tenga la bondad el señor delegado que habló, de repetir la observación que hizo.

El C. Leopoldo Ruiz:

Nada más para que se corrigiera el nombre. En vez de Montes, Monter. (Voces: ¡Ah!)

El C. secretario:

Es de aprobarse la credencial expedida por el ciudadano general Víctor Monter. En votación económica se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse en pie. Aprobada.

El C. Márquez:

Parece que no está integrada la Mesa; hay solamente ...

El C. secretario:

La Mesa, por conducto de la Secretaría, suplica al preopinante haga el favor de repetir su interpelación.

El C. Márquez:

Me parece que no está integrada la Mesa Directiva.

El C. secretario:

La Mesa informa por conducto de la Secretaría, que sí está integrada la Mesa Directiva, supuesto que el segundo vicepresidente está en la Presidencia, y hay tres secretarios.

El C. Márquez:

Yo no veo más que al señor presidente.

El C. secretario:

La Mesa, por conducto de la Secretaría, informa que hay tres secretarios y dos vicepresidentes; por consiguiente, está integrada la Mesa Directiva.

Está a discusión la consulta del general Ramón Frausto.

El C. Berlanga:

Es innecesario preguntar a la Secretaría de Guerra si es asimilado o no; está expresamente especificado el caso en la Ordenanza; nada más consultar el artículo respectivo, y creo, según lo precisamente especificado ahí, que el general Frausto es asimilado.

El C. secretario:

La Mesa, por conducto de la Secretaría, pregunta ...

El C. Osuna:

Me parecen del todo razonables las razones que expone el señor, y el dictamen debemos aprobarlo. La única manera de saber si es general asimilado o efectivo, es que la Secretaría de Guerra informe dónde está su despacho. Tenemos muchos médicos que por sus méritos podría considerarlos el compañero Berlanga como asimilados; pero puede que no lo sean; puede haber abogados que sean asimilados y que no lo sean y sean efectivos, y en todo caso, lo mejor es preguntarlo.

El C. secretario:

Está a discusión. ¿No hay quien tome la palabra? La Mesa, por conducto de la Secretaría, pregunta si esta Convención cree que la categoría del señor Frausto es de asimilado o efectivo. La Mesa, por conducto de la Secretaría, pregunta si se aprueba el dictamen. Los ciudadanos que estén por la afirmativa, sírvanse poner en pie. Aprobado.

Está a discusión la credencial expedida por el ciudadano J. M. García.

El C. Mariel:

¿A favor de quién está la credencial?

El C. secretario:

A favor del capitán primero Félix Soto, que se encuentra presente.

El C. Soto:

El general está ahorita en el Estado de México, adonde él ha estado operando en sus campañas; es de la Brigada Belisario Domínguez; representa a la Brigada a que pertenecemos.

El C. Serrano:

Pido la palabra para una pregunta. ¿Tiene la bondad de informarme quién es el firmante de esa credencial?

El C. secretario:

La firma J. M. García.

El C. Serrano:

Por recomendación del general Laveaga, voy a informar a la Mesa que dicho general García está preso en México por el robo de un automóvil; y, por mi parte, tengo en mi poder cartas que él escribió a uno de los ministros de Huerta, recientemente; cartas que me pidió el coronel Norsagaray, para presentarlas a la Comandancia Militar, como acusación en su contra. Yo ya se las he enviado, y creo que esa acusación prosperará, porque es de justicia.

El C. Vallejo:

Quiero hacer una aclaración: ¿por virtud de este proceso, tiene el señor general García derecho de estar representado, o se le suspende, según los preceptos constitucionales?

El C. Muñoz Infante:

Tengo entendido que en estas credenciales dudosas, lo mejor es dirigirse a la Secretaría de Guerra y Marina, pidiendo informes, que tiene el ineludible deber de dar.

El C. secretario:

En vista de los datos registrados, la Mesa Directiva, por conducto de la Secretaría, suplica a las personas que integran la Comisión Revisora de Credenciales, pasen desde luego a dictaminar.

El C. Aguirre Benavides:

Qué, ¿no nos podrá decir el señor delegado a qué división pertenece el señor general José M. García?

El C. Vásquez:

En vista de que el representante del señor general García no puede explicarse claramente, yo creo que sería conveniente pedir informes directamente a México; no juzgo la cuestión del automóvil como una agravante en contra del general García, porque no es el único que ha sacado automóviles de México. (Aplausos y risas)

El C. Julio Madero:

Yo creo que es de aceptarse la representación; el señor general García no está sentenciado, y no habiendo una sentencia, podemos admitirlo.

El C. Aguirre Benavides:

La comisión pide respetuosamente le den algunos informes del señor general García, porque no lo conoce.

Un C. delegado:

Precisamente son los que se van a pedir.

El C. Serrano:

Suplico atentamente a la Asamblea no tome en cuenta exclusivamente lo de los automóviles; que no olvide las cartas que dirigió a un ministro de Huerta. Esos son los planes que él ponía para sofocar el movimiento separatista de Sonora. Textual.

El C. Serrano Tamez:

Según entiendo, el señor general se ha levantado en armas desde el mes de julio o agosto de este año.

El C. secretario:

Considerando de suma importancia la asistencia personal a esta Convención de todos los generales que tengan mando de fuerzas, etcétera ... (Leyó la iniciativa del ciudadano general Cervantes) El dictamen de la Comisión Revisora de Credenciales es el siguiente: (Lo leyó)

Está a discusión.

El C. Paniagua:

Pido la palabra para suplicar al autor de la proposición, señor general Cervantes, se sirva incluir allí, en los nombres de los generales a los cuales se va a excitar, para que vengan a las sesiones de esta Convención, el nombre de mi general Francisco Villa.

El C. De la Barrera:

Para una moción de orden. No se han asentado en la iniciativa los nombres de los generales.

El C. Cervantes:

Precisamente. Esa moción dice que a los demás generales que no han mandado sus representantes; por más que el señor general Villa estuvo aquí y firmó y protestó, a los demás generales que no han venido son a las que debemos hacer que vengan.

El C. secretario:

¿Se considera suficientemente discutido el punto? En votación económica se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse en pie. Aprobado.

El C. Raúl Madero:

Pido que se cuente la votación.

El C. Pasuengo:

¿Se fijó usted bien, señor secretario, en que hubo mayoría de los que nos pusimos en pie? ¿Se fijó usted bien? Yo creo que no.

El C. secretario:

Por acuerdo de la Mesa, se repite la votación. Los que aprueben el dictamen de la Comisión aprobando la proposición del general Cervantes, sírvanse ponerse en pie. Aprobado.

Con relación a una acusación presentada por Carlos Plank en contra del señor Piña ... (Leyó) En votación económica se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse en pie. Aprobado.

Respecto de la credencial expedida por el general de brigada Pedro Guzmán, en favor del coronel Luis G. Santoyo, la Comisión Revisora de Credenciales opinó así: (Leyó)

El C. García Aragón:

El señor Pedro Guzmán es de los guerrilleros del sur; ha estado al lado del general Salgado; pero últimamente Salgado volvió a pronunciarse, reconoció al Primer Jefe, y luego que se le dio dinero, se pronunció nuevamente en el sur. El señor general Guzmán me dirigió un telegrama diciendo que quería agregarse a las tropas de mi mando, y lo acepté como tal. Está en México en la actualidad, y llegó aquí anoche; así es que el general Guzmán no es general de brigada; es brigadier.

El C. Ruiz:

Deseo preguntar respetuosamente al señor secretario si ya terminaron de leerse los dictámenes de la comisión de Poderes.

El C. secretario:

Todavía no. En votación económica se pregunta si se aprueba el dictamen de la comisión. El dictamen de la comisión es el siguiente:

Esta comisión ha tenido conocimiento del general Pedro Guzmán ... (Leyó)

El C. Lugo:

Pido la palabra para informar a la Asamblea que el señor Pedro Guzmán es general de las fuerzas del Estado de Guerrero y que actualmente no sé si se encuentra aquí; pero supe que estaba en México, por lo que creo que tiene perfecto derecho para hacerse representar en esta Asamblea.

El C. secretario:

La Mesa dispone que la comisión revisora de credenciales dictamine desde luego.

Octavo. Es de aceptarse la credencial expedida por el ciudadano general Cabanillas ... (Leyó)

El C. R. González V.:

En primer lugar, había que ver que la Asamblea no ha acordado que no son de canjearse las delegaciones, sino que los delegados no pueden cambiarlas de por sí ellos mismos; pero los presentantes sí pueden cambiar sus representaciones cuando quieran; así lo hemos acordado. El señor representante, trayendo su representación con fecha posterior a la que el otro representante tenía aquí, tiene derecho a que salga el representante anterior y que entre el nuevo; así es que el dictamen de esa comisión creo que no está conforme.

El C. Paniagua:

Lo que esta Asamblea ha aprobado es que los representantes sólo dejarán de funcionar cuando vengan aquellos a quienes están representando.

Esto es lo que está aprobado.

El C. secretario:

¿Se considera suficientemente discutido el punto? Los que aprueben el dictamen de la comisión dictaminadora, sírvanse ponerse en pie. Aprobado.

Está a discusión la credencial del señor general Juan Lechuga, en favor del teniente coronel Agustín García Balderrama. El dictamen es el siguiente: Es de aprobarse la presente credencial. Está a discusión, y sin ella, en votación económica se pregunta si se aprueba el dictamen de la comisión. (Voces: ¿cuál es?) (Lo leyó) ¿Es de aprobarse la credencial expedida? Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse en pie. Aprobado.

Está a discusión la credencial expedida por el general brigadier Alejo Mastache en favor del coronel Rosario L. Santana. La comisión dictaminó así: Es de aprobarse la presente credencial. En votación económica se pregunta si se aprueba. Los ciudadanos que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse en pie. Aprobada.

El C. Hay:

Pido la palabra para suplicar respetuosamente se reconsidere la credencial expedida por el general Cabanillas a nombre del capitán Ortega, en substitución del coronel Espinosa, que se encuentra enfermo, y por eso mismo, no puede asistir a las conferencias de la Convención, pues, según entiendo, esta Asamblea comprendió que era el coronel Espinosa el que subdelegaba al capitán Ortega, cuando en realidad es que el mismo general Cabanillas retiraba el poder a Espinosa y lo daba en cambio a Ortega. Pido, por lo tanto, que se reconsidere el punto.

El C. Pasuengo:

Pido la palabra para apoyar 10 que dice el compañero Hay.

Si en verdad el general Cabanillas ha nombrado al capitán de quien se hace mención, en mi humilde opinión creo que debe aprobarse, y no podría ser aprobado siempre que el coronel Espinosa hiciera el nombramiento a otro.

El C. Muñoz Infante:

Pido que se haga constar que no hicimos lo que debimos.

La credencial ésta fue reprobada por la honorable Asamblea; debe respetarse' el voto de los ciudadanos que están aquí.

El C. secretario:

La Mesa Directiva, por conducto de la Secretaria, pregunta si la Asamblea da permiso para que se reconsidere el asunto. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse en pie. Se reconsidera.

El telegrama del general Cabanillas es el siguiente:

Mazatlán, el 19 de octubre de 1914.
Ciudadano Presidente Mesa Directíva de la Junta Pacifista.

Hónrome comunicarle que por enfermedad C. coronel Isaac Espinosa, con esta fecha doy amplias facultades al ciudadano capitán primero Manuel Ortega, para que me represente en la Convención que tiene verificativo en esa ciudad.

Muy respetuosamente.El general jefe de la brigada, José María R. Cabanillas.

El C. Iturbe:

Para conocimiento de la Asamblea, manifiesto que el general Cabanillas es el jefe accidental de la brigada de Sinaloa, que consta como de mil hombres; y el coronel Isaac Espinosa, a quien había nombrado anteriormente su representante, se encuentra enfermo en México, y por esa razón delegó su representación en el capitán Ortega.

El C. Martín Espinosa:

Voy a aclarar de una vez por todas lo que pasa aquí: el coronel Espinosa está enfermo en México, y de un momento a otro se presentará aquí en representación del general Cabanillas.

El C. secretario:

En votación económica se pregunta si se aprueba.

El C. Hay:

Vuelvo a repetir lo que dije antes: tiene mucho derecho el general para cambiar su delegación cuando lo estime conveniente. La Asamblea no ha dictado un acuerdo en que niegue eso a los generales; así es que si no le conviniere el coronel Espinosa, tendría sobrado derecho para nombrar a quien quisiera. Hago esa aclaración, porque no había entendido bien, porque dice allí que la Asamblea había aprobado que no podía cambiar de delegación; sí tiene derecho, y debe aprobarse la credencíal del capitán Ortega.

El C. Iturbe:

Suplico se lea el mensaje del general Cabanillas.

(El C. secretario leyó)

El C. Hay:

Para hacer una aclaración.Aun cuando a mí me sería muy grato ver aquí entre nosotros al pundonoroso compañero coronel Espinosa, creo yo que si rechazamos esta credencial en favor del capitán Ortega, haremos una injusticia a los deseos del general Cabanillas. El coronel Espinosa comunicó al general Cabanillas que se encontraba enfermo en México. En atención a esa comunicación, el general Cabanillas retira su poder, y en lugar de a él, se lo da al capitán Ortega. Esa credencial llega aquí en momentos en que extraoficialmente sabemos que el coronel Espinosa se encuentra gozando de buena salud. Era necesario entonces, para reprobar el que el coronel Espinosa lo represente, comunicar de nuevo al general Cabanillas que ya estaba gozando de buena salud, y que el general Cabanillas nuevamente retirara el poder al capitán Ortega y se lo vuelva a dar a Espinosa. Yo creo que sería una complicación extraordinaria y que, por lo tanto, es de aprobarse el dictamen.

El C. Lugo:

Creo que lo más conveniente sería que la comisión revisora informara su dictamen. Se trata, en el momento, del señor general Cabanillas, que supone que el coronel Espinosa se encuentra enfermo. Lo más natural es que la Mesa certifique si efectivamente está enfermo Espinosa, y si está en la imposibilidad de representar al general Cabanillas; no siendo así, es claro que no puede dictaminar en la forma condicional en que lo hace, sino en la forma categórica: se aprueba, o no se aprueba.

El C. Aguirre Benavides:

La comisión pide respetuosamente a la Asamb]ea le permita retirar la última parte del dictamen, para que quede terminante, respecto de que el capitán Ortega sea su representante, por estar así unificada la opinión. (Aplausos)

El C. secretario:

El dictamen reformado quedó así: (Leyó) En votación económica se pregunta si se aprueba. Los ciudadanos que estén por ]a afirmativa, sírvanse ponerse en pie. Aprobado.

Sobre la credencial expedida por el general Gertrudis Sánchez en favor del C. coronel Sabás Valladares, recayó el siguiente dictamen: Es de aprobarse la presente credencial. En votación económica se pregunta si se aprueba. Los ciudadanos que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse en pie. Aprobada.

(El mismo C. secretario dio cuenta con el dictamen de la comisión de Poderes, que propone que el C. general García no tenga representación en la Asamblea por estar preso en la Penitenciaría de la capital)

El C. De la Barrera:

La ciudadanía se pierde cuando ha recaído una sentencia judicial; pero como no ha sido sentenciado, tiene sus derechos de ciudadano todavía.

El C. Eulalio Gutiérrez:

Creo que en este caso se necesita saber cuál es el motivo por qué está preso; no sabemos si lo está realmente por algunas intrigas políticas. Que se hagan aclaraciones.

El C. Iturbe:

La Asamb]ea ha sido informada que este señor se levantó en julio de este año y se titula general de brigada.

El C. Lugo:

Para apoyar el dictamen de la comisión revisora. Basta que se suspenda el derecho de ciudadanía para que se prive al que está suspenso de estar sentado en esta Asamblea. El hecho de estar procesado el general García, es motivo suficiente para que se suspendan los derechos de ciudadanía, ipso jure, como dicen los juristas, pues de hecho se suspenden los derechos de ciudadanía; y, en consecuencia, muy bien dictaminó la comisión Revisora con negar que esté representado el señor general García en esta Asamblea.

El C. secretario:

En votación económica, ¿se aprueba el dictamen de la comisión?

El C. Gallegos:

Con ese mismo principio, se podrían rechazar a algunas personas que estuvieran en ese lugar. Algunos generales o algunos que tuvieran poder podrían mandarlos a la Penitenciaría o a cualquier lugar, y no dejarlos venir, aun cuando fuera sencillamente para una protesta. Creo que para estos momentos solemnes, se debe dar permiso para que vengan y sean representados.

El C. secretario:

Se pregunta si está suficientemente discutido el punto. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse en pie.

El C. Hay:

Yo creo que el hecho de estar en la cárcel no debe evitarnos el aceptarlo aquí entre nosotros. Eso no debemos tenerlo en consideración, puesto que, como han dicho algunos, podría ser por razones que no atañen a su honor ni a su carácter de ciudadano armado; pero si hay algunas razones de peso, como las que indica el señor Serrano; como las que ha indicado el general Iturbe, pues entonces sí es de tomarse en consideración el que no se haya presentado aquí. Podríamos abstenernos de considerar el hecho de que esté en la cárcel, y ponernos a discutir solamente las razones que ulteriormente han sido expuestas ante esta Asamblea, para que sea rechazada la credencial, desde el momento en que es un general que se levantó en el mes de julio. Yo creo que es muy poco general.

El C. De la Barrera:

Para aprobar lo que dice el señor Hay, yo propondría que se hiciera con ese general lo que se hizo con el general Castellanos: traerlo aquí para formarle un consejo de guerra, y aquí que depure su conducta. (Voces: no, no)

El C. Serrano:

No se trata aquí más que de reconocer o desechar la credencial; no debemos discutir más allá de este asunto. Los que tengan quejas contra este general, podrán presentarlas a su tiempo, como se ha hecho ya con otros muchos; pero la credencial no debe ser aceptada por los motivos que se han expuesto.

El C. secretario:

Se pregunta si se considera suficientemente discutido el punto. Los que estén por la afirmativa, que se sirvan poner en pie. En votación económica se pregunta si se aprueba el dictamen de la comisión Revisora.

El C. Raúl Madero:

Tenga la bondad de leer el dictamen.

(El C. secretario volvió a leer el dictamen relativo)

El C. Mariel:

Pido la palabra.

El C. secretario:

En votación económica se pregunta si se aprueba el dictamen de la comisión.

El C. Hay:

Para una moción de orden. Suplicaría a los señores miembros de la comisión que modificaran su dictamen y dieran como razón, no el hecho de que se encuentra en la Penitenciaría, sino algunas otras razones que tuvieran que presentar.

Me voy a permitir hacer presente el precedente del general Alvarado: este general se encontraba en la Penitenciaría ... (Una voz: ¡pero por asuntos políticos!)

El general Alvarado se encontraba en la Penitenciaría, por asuntos políticos, y no está representado aquí, porque no tuvo oportunidad de mandar la credencial. Si se nos hubiera presentado una credencial, con toda seguridad la habríamos aceptado aquí, porque es general, y tiene derecho a serlo; pero no tiene ninguna mancha de ninguna clase. Ahora bien, este caso, totalmente diferente, y que se da como base para que no sea aceptado aquí el hecho de que está en la Penitenciaría, cuando creo yo que deben ser otras las causas; por lo tanto, pediría se retirara el dictamen y se modificara, dando las razones por las cuales se debe rechazar.

El C. secretario:

La Mesa informa, por conducto de la Secretaría, que no hay nada a discusión. En votación económica se pregunta si se aprueba el dictamen de la comisión.

El C. Serrano:

Pido la palabra para una moción de orden. Por la precipitación de la Secretaría, se vino a decir que está suficientemente discutido, cuando no es cierto; que se repita la votación de que está suficientemente discutido, y se verá que no.

El C. Robles:

La Asamblea toda, cuando se le pidió precisamente que se pararan a atestiguar que estaba suficientemente discutido, se vio que hubo mayoría.

El C. secretario:

En votación económica se pregunta si se aprueba el dictamen de la comisión. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse en pie. Reprobado.

Los ciudadanos delegados que estén presentes en este recinto y no hayan prestado la protesta, sírvanse pasar a hacerlo.

El C. Ruiz:

Pregunté antes que si había terminado el señor secretario, y ya que terminó, quería hacer una moción. Voy a volver sobre la credencial que parece haber sido aceptada por la Asamblea, y digo parece, porque hubo duda en algunos que se levantaron, y otros no. Se trata de la credencial del señor Urbalejo. ¿Está aquí presente el representante del general Urbalejo? ¿ Quién es el general Urbalejo? ¿Quién lo nombró general? (Voces: ¡ah! ¡ah! Siseos)

El señor Urbalejo es un yaqui, señores, nombrado por el señor gobernador, y el señor gobernador no tiene derecho.

El C. Aguirre Benavides:

¿Y quién es el que tiene derecho de nombrarlo entonces? Los grados del señor Carranza están tan choteados como los de Zapata.

El C. secretario:

La Mesa, por conducto de la Secretaría, informa que la credencial del general Urbalejo, en favor del capitán primero Osterman, fue aprobada por la Asamblea. (Aplausos)

El C. Romano Tamez:

Creo que la votación de la credencial del general Garcia está confusa. La Asamblea no se ha dado cuenta qué ha aprobado o reprobado.

El C. secretario:

La Secretaría informa que la Asamblea reprobó el dictamen de las comisiones.

El C. Romano Tamez:

Lo que reprobó fue la credencial.

El C. secretario:

Reprobó el dictamen de la comisión. Sírvanse pasar a protestar las personas que aún no lo hayan hecho. Capitán primero José H. Osterman.

El C. presidente:

¿Protesta usted, por su honor de ciudadano armado, cumplir y hacer cumplir las decisiones de esta Asamblea?

El C. Osterman:

Sí protesto.

El C. presidente:

Si no lo hiciere, la Patria se lo demande.

El C. secretario:

Capitán primero Elfego Chagoy.

El C. presidente:

¿Protesta usted, por su honor de ciudadano armado, cumplir y hacer cumplir las decisiones de esta Asamblea?

El C. Chagoy:

Sí protesto.

El C. presidente:

Si no lo hiciere, la Patria se lo demande.

El C. secretario:

Coronel Sabás Valladares.

El C. presidente:

¿Protesta usted, por su honor de ciudadano armado, cumplir y hacer cumplir las decisiones de esta Asamblea?

El C. Valladares:

Sí protesto.

El C. presidente:

Si no lo hiciere, la Patria se lo demande.

El C. secretario:

Coronel Rosario L. Santana.

El C. presidente:

¿Protesta usted, por su honor de ciudadano armado, cumplir y hacer cumplir las decisiones de esta Asamblea?

El C. Santana.

Sí protesto.

El C. presidente:

Si no lo hiciere, la Patria se lo demande.

El C. secretario:

Teniente coronel Agustín García Valderrama.

El C. presidente:

¿Protesta usted, por su honor de ciudadano armado, cumplir y hacer cumplir las decisiones de esta Asamblea?

El C. García Valderrema:

Sí protesto.

El C. presidente:

Si no lo hiciere, la Patria se lo demande.

El C. secretario:

Capitán primero Manuel Ortega.

El C. presidente:

¿Protesta usted, por' su honor de ciudadano armado, cumplir y hacer cumplir las decisiones de esta Asamblea?

El C. Manuel Ortega:

Sí protesto.

El C. presidente:

Si no lo hiciere, la Patria se lo demande.

El C. secretario:

General Emilio Orozco. Está a discusión su personalidad, de la División del Sur. ¿No hay quien tome la palabra? En votación económica se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, sírvanse poner de pie. Aprobada. (Aplausos)

El C. presidente:

¿Protesta usted, por su honor de ciudadano armado, cumplir y hacer cumplir las decisiones de esta Asamblea?

El C. Orozco:

Sí protesto.

El C. presidente:

Si no lo hiciere, la Patria se lo demande.

El C. secretario:

El dictamen de la comisión Revisora de Credenciales sobre la del C. general Francisco Murguía, a favor del teniente coronel Carlos S. Fierro, es el siguiente: Es de aprobarse la presente credencial. Está a discusión. ¿No hay quien pida la palabra? En votación económica se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse en pie. Aprobado.

El mismo C. secretario:

Teniente coronel Carlos S. Fierro.

El C. presidente:

¿Protesta usted, por su honor de ciudadano armado cumplir y hacer cumplir las decisiones de esta Asamblea?

El C. Fierro:

Sí protesto.

El C. presidente:

Si no lo hiciere, la Patria se lo demande.

El C. Osuna:

Pido la palabra para hacer una pregunta a la Mesa.

Hace cinco días puse un mensaje cifrado a mi poderdante, el cual, después de no recibir contestación a él, pregunté si lo había recibido, y me contestó ayer diciéndome que no lo ha recibido. Ocurrí a la oficina telegráfica a informarme el motivo, y me dicen lo siguiente:

Para hacer averiguación solicitud su mensaje para el general Jesús Carranza, se buscó éste, y no encontrándose, probable se lo llevó censor sin dar aviso.

Deseo saber si hay censor, primeramente, en el telégrafo, porque no tenía conocimiento de ello, y en segundo lugar, si tiene derecho de substraer de él los mensajes sin dar aviso al interesado.

El C. García Aragón:

La censura se estableció en el telégrafo, porque así fue acordado desde que era provisional la Junta de Gobierno, y hasta la fecha no se ha retirado la censura. Ultimamente se pasó una nota al telégrafo diciéndose a los telegrafistas que todo mensaje que fuera en clave, o cifrado, fuera pasado a la comisión de Gobernación, para que pudiera decir si estos mensajes podían pasar. Eso es lo que puedo informar al señor.

El C. presidente:

¿Decía usted que autorizó que se retiraran de allí mensajes?

El C. García Aragón:

No, señor; no hemos mandado retirar ninguno.

El C. presidente:

¿Pero que pasaran a la Junta de Gobierno?

El C. García Aragón:

Que se diera cuenta a ella, para que los interesados dieran informes a la Junta de Gobierno.

El C. presidente:

¿Con qué autorización?

El C. García Aragón:

Así se acordó por la Junta cuando se inició la Junta de Gobierno, antes de que la Convención se declarara soberana, y no ha habido ningún acuerdo sobre eso. Ultimamente se nos dieron amplias facultades; por consecuencia, sigue la disposición vigente.

El C. Osuna:

Entiendo que las facultades amplias que se dieron a la Junta de Gobierno, fueron para guardar el orden, pero no para coartar los derechos de los delegados, que tienen necesidad de dar cuenta de sus trabajos a sus poderdantes; nadie sabe qué pasó con ese mensaje, y yo no hubiera tenido inconveniente ninguno en dar la clave para que se descifrase, puesto que no conspiro contra nadie. Simplemente es un asunto que me interesaba poner al tanto a mi poderdante y preguntarle lo que necesitaba yo saber, y ese mensaje no existe siquiera en la oficina del telégrafo.

El C. García Aragón:

No fue precisamente porque se creyera que los señores delegados conspirasen; fue porque no pasaran ciertos mensajes de la prensa, y que se tuviera conocimiento de cuáles eran las noticias que iban de aquí, para no estorbar la marcha de la Convención.

El C. Osuna:

Una aclaración. Soy bastante conocído de los míembros del Gobierno para que sepan que no soy repórter, sino delegado; tengo iguales derechos que todos los demás, aunque no sea general.

El C. secretario:

La Mesa pregunta a la honorable Asamblea si está conforme con lo siguiente: que se retiren desde luego los censores de la prensa y que los delegados pueden mandar sus mensajes en clave. (Aplausos) En votación económica se pregunta si se aprueba. Los ciudadanos que estén por la afirmativa, sírvanse poner en pie. Aprobado.

El C. Romano Tamez:

Que se ponga a discusión lo de los censores de la prensa.

El C. presidente:

Necesita usted hacer una nueva proposición; ya este asunto se aprobó.

El C. Hernández y García:

Pido la palabra.

Se ha manifestado ...

El C. presidente:

Un momento. Deje usted que guarden silencio, porque no se oye absolutamente nada.

El C. Hernández y García:

Se propone que al retirarse la censura de la prensa, los delegados puedan mandar sus mensajes a sus representados, a quienes han venido a representar en esta Convención, en clave; y dado que los informes que hay que rendir, serán relativos a asuntos que sean de interés general ...

El C. presidente:

No está a discusión eso. Si usted quiere que se reconsidere el asunto, necesita hacer una nueva proposición; ya se aprobó lo que propuso la Mesa.

El C. Hernández y García:

Que esos mensajes fueran dirigidos en clave, es a lo que yo me refiero.

El C. presidente:

Ya está aprobado.

El C. M. Contreras:

Para una aclaración. ¿Al hacer uso de la clave, ¿ puede uno tratar los asuntos de las sesiones secretas, o únicamente los de las sesiones privadas o públicas?

Una voz:

Se deja al criterio y a la honradez de los delegados.

El C. M. Contreras:

Hay que consultarlo, ¿verdad?

El C. secretario:

Se ha recibido el siguiente telegrama del señor general Angeles:De México, D. F., el 22 de octubre de 1914.
General Antonio I. Villarreal.

Díceme de Cuernavaca general Felipe Angeles, para transmitir a usted:Como tuve el honor de comunicar a usted, ayer se trasladó la comisión de que formo parte a esta capital; tanto durante el trayecto como a nuestra llegada a Cuernavaca, fuimos recibidos con cortesía y cordialidad. Estuve conferenciando con el señor Zapata, quien me comunicó que enviará una comisión con nosotros, que saldrá mañana para México y Aguascalientes.

Atentamente,
General Felipe Angeles.
Manuel Palafox.

Salúdolo afectuosamente.
El general jefe de la División de Caballería, Lucio Blanco.

La Mesa ordena se dé lectura nuevamente al telegrama del general Angeles, fechado el 19, y en el cual se menciona que estaba para expirar el plazo que se le había fijado para su regreso a Aguascalientes. (Lo leyó)

El C. Raúl Madero:

La comisión de Gobernación quiere hacer saber a la Asamblea que la comisión tiene un dictamen sobre el particular.

El C. secretario:

En relación con el mensaje a que se dio lectura antes, existe aquí un dictamen que dice: La comisión de Gobernación tiene el honor de proponer a la honorable Asamblea ... (Leyó el dictamen que propone se prorrogue hasta el día 28 de los corrientes el plazo fijado para que regrese la comisión que fue a conferenciar con el general Emiliano Zapata) Está a discusión.

El C. García Valderrama:

Unicamente para contestar a esa proposición que se hace de que se prorrogue hasta el día 28. Yo comprendo que es un tiempo bastante bueno, pues de lo contrario, yo conozco bastante ese lugar de Cuernavaca, conozco esos caminos y conozco también el modo de proceder del general Zapata, que puede detenerlos uno o dos días más; y también sería favorable que se prorrogara hasta el 28, para dar tiempo a los delegados para que cumplan.

El C. Osuna:

Suplicaría se dé lectura al mensaje en que avisan la fecha en que salen de allá.

El C. secretario:

El mensaje es fechado hoy y dice así: (Lo leyó) El mensaje del general Angeles está fechado en Cuernavaca.

El C. Osuna:

Hicieron un día de camino de México a Cuernavaca, que es lo que se puede hacer en automóvil; salen el día 23, y en un día llegan de todos modos.

El C. secretario:

El señor presidente informa que ese camino lo ha recorrido en tres horas en automóvil.

El C. Osuna:

Llegan en la mañana misma a México, que es el 23, y pueden salir en la noche en un tren especial y estar aquí el 24, o puede ser que el 23; pero no hasta él 28, porque no tiene caso.

El C. Raúl Madero:

La comisión ha considerado hasta el 28, por razón, en primer lugar, de que no tenia conocimiento de este último telegrama del general Angeles, y, en segundo, porque no sabemos si disponen o no de automóviles, o si se los pondrá la comisión. Pero si son 15 o 20 los delegados de Zapata, quizá no tengan automóviles suficientes para moverse con sus ayudantes y oficiales que traigan, y tendrán que venirse a caballo. Por eso sería preferible fijar la fecha hasta que llegue la comisión.

El C. Serrano:

Para que fuera más práctico esto, podríamos proponer que la suspensión para tratar asuntos de importancia, como se ha acordado aquí, dure hasta que se incorporen el general Angeles y la comisión.

El C. Paniagua:

No, eso es muy ambiguo.

El C. Muñoz Infante:

La honorable Asamblea se puede dirigir a la Secretaría de Guerra diciéndole que presten los vehiculos que se necesiten para que esas personas lleguen pronto a México.

El C. Lugo:

Habiendo expuesto el señor Madero que hizo su proposición en vista de que no se tenian noticias del último telegrama, yo le suplicaría que retirara su proposición y la formulara por un término más breve, en atención a la seguridad que hay de que esa comisión estará dentro de muy pocos días en esta ciudad.

El C. Raúl Madero:

La comisión está dispuesta a retirarlo, y quería conocer la opinión de la Asamblea. Está dispuesta para el dia 26.

El C. secretario:

La Mesa consulta a la Asamblea si permite que se retire el dictamen para modificarlo. Sí se permite. El nuevo dictamen dice así: (Leyó el que propone que el plazo fenezca el día 26) Está a discusión. ¿No hay quién pida la palabra? En votación económica se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie. Aprobado.

El ciudadano Mariel ha presentado la siguiente proposición:

El que subscribe pide respetuosamente a esta honorable Asamblea se sirva ordenar al señor general Pánfilo Natera se digne librar sus respetables órdenes a fin de que una escolta de cincuenta hombres, pertenecientes a la Brigada de mi mando, los cuales se encuentran en Jerez, Estado de Zacatecas, puedan pasar a incorporarse a su matriz.

Aguascalientes, a 22 de octubre de 1914.
Francisco de P. Mariel.

A la comisión de Guerra.

La comisión de Poderes rinde el siguiente dictamen: (Leyó el que consulta se rechace la credencial del ciudadano José M. García) Está a discusión el dictamen de la comisión. ¿No hay quién pida la palabra? En votación económica se pregunta si se aprueba. Los que estén por la afirmativa, sírvanse ponerse de pie. Aprobado el dictamen de la comisión.

Se ha recibido el siguiente telegrama del ciudadano Maytorena.

De kilómetro 5 a Naco, el 19 de octubre de 1914.
Convención Militar.

Su mensaje referente levantamiento sitio Naco. Manifiéstole respetuosamente que por cooperar a patrióticos deseos Convención en bien paz pública, intervine para libertar presos políticos y dicté severamente suspensión hostilidades. La disposición de hoy se relaciona con defensa y seguridad del Estado y Gobierno Constitucional y Soberano que represento. Como el general Hill ha publicado con su firma que sólo obedecerá órdenes directas del señor Carranza, considero como una justa medida de prudencia proceder en la forma que indica esa Convención cuando ella tenga la seguridad de que Hill acatará sus disposiciones, pues de otro modo el sacrificio será para mis fuerzas, las cuales, al retirarse de sus avanzadas frente a trincheras de Hill, éste podrá ordenar nutrido fuego sobre fuerzas Estado. He de estimar de esa Convención considere las razones expuestas, por ser de justicia y estar fundadas en las necesidades de velar por la seguridad personas de los ciudadanos que constituyen las fuerzas del Estado.

Atentamente.
El gobernador constitucional, José Ma. Maytorena.

A este telegrama se contestó en estos términos: (Leyó)

Se ha recibido el siguiente telegrama del general Sosa:

De campamento kilómetro 7, el 21 de octubre de 1914.
Señor general Antonio I. Villarreal, presidente de la Convención.

Hoy llegué a este lugar, y después de hablar extensamente con el gobernador Maytorena, he enterádome de que está dispuesto a acatar disposiciones esa Asamblea, suspendiendo hostilidades, retirando sus fuerzas a lugar conveniente, pues órdenes de suspender fuego hanse dado por gobernador desde hace varios días; pero soldados de ambos lados rompen fuego de sacatando órdenes. Como al retirarse fuerzas Maytorena pueden ser atacadas por fuerzas Hill, aun sin órdenes para ello, es necesario que esa Convención ordene al general Hill tome toda clase de precauciones para que esto no suceda; y después de tener esa Convención seguridades del general Hill, dar orden al gobernador Maytorena para retirar sus fuerzas.

Entre 10 a 11 a.m., hora del día designado, el día 18 del presente, fueron puestos en libertad absoluta una parte de los sesenta y un presos políticos que había en Hermosillo, y el 19 el resto, contando entre estos últimos general Alvarado, su Estado Mayor y señor Breceda. Pero según informes periódico Paso del Norte fecha 21, por orden del general Villarreal fueron reaprehendidos señores Bonilla y demás presos políticos que había en México, se dio también por gobernador Maytorena, a su vez, orden de reaprehensión de algunos de los puestos en libertad en Hermosillo.

Suplico a usted darme a conocer cuanto antes lo que haya de cierto en noticia de Paso del Norte, para gestionar en seguida libertad estos presos.

Atentamente.
General Ramón V. Sosa.

A este telegrama se contestó en estos términos: El telegrama puesto al señor Carranza, en virtud de lo leido antes, es el siguiente: (Leyó)

Se ha recibido el siguiente telegrama del general Cándido Aguilar:

De Soledad, Ver., a Aguascalientes, el 22 de octubre de 1914.
General Antonio I. Villarreal, presidente Convención.
Urgente.

Tengo el honor de participar a usted que mi representante, el señor coronel Josué Benignos, me dice se encuentra enfermo, por lo que me suplica nombre en su lugar persona que me represente. Como hay algunos otros señores delegados que se han enfermado, le ruego muy atentamente le mande médico a señor coronel Benignos para que lo reconozca y dictamine sobre su enfermedad, y en caso de que facultativo certifique que su enfermedad requiere atención, se sirva aceptar esa honorable Convención como mi representante legítimo, en substitución del señor coronel Benignos, al señor teniente coronel Carlos Prieto.

Atentamente.
El gobernador y comandante militar del Estado, general C. Aguilar.

La Mesa nombra a los doctores Ríos Zertuche, Miranda y Siurob para que dictaminen sobre la enfermedad del coronel Benignos.

El C. Lugo:

Si mal no he entendido, al oír el telegrama del gobernador Maytorena al señor presidente de esta honorable Asamblea, parece que indica que se designe día en que puedan retirarse con toda seguridad las fuerzas de su mando que están asediando las plazas ocupadas por el general Hill; y en la respuesta que dio el señor presidente, no advertí que se refiriera a este punto; y muy respetuosamente someto a la consideración de esta honorable Asamblea y al señor presidente, que, si lo cree justo, ponga otro telegrama refiriéndose a este punto, porque me parece de capital importancia, puesto que es dar el tiempo en que estén frente uno y otro enemigo, y deseo que se tome en consideración este punto.

El C. secretario:

La Mesa informa, por conducto de la Secretaría, que tiene razón el señor general y licenciado José Inocente Lugo, e inmediatamente se va a dirigir otro mensaje en el sentido indicado.

El C. Osuna:

Creí que la fecha era para otro asunto, y no para la retirada de las fuerzas.

El C. secretario:

La Secretaría informa que en el telegrama formaban una sola oración la fecha del día en que iban a poner en libertad a los presos y el día pactado en que fueron puestos en libertad los presos políticos.

El C. Raúl Madero:

La comisión de Gobernación hace una súplica a la Mesa para que se lean cuatro dictámenes por ser de importancia.

El C. secretario:

La Mesa dispone que se levante la sesión pública para entrar en secreta.

Se levantó la sesión a las 5.35 p.m.

Índice de Crónicas y debates de la Soberana Convención Revolucionaria Recopilación de Florencio Barrera FuentesSesión celebrada el día 21 de octubre de 1914 en la ciudad de Aguascalientes Primera parte de la Sesión celebrada el día 23 de octubre de 1914 en la ciudad de AguascalientesBiblioteca Virtual Antorcha